Fácil de instalar
Enroscar la válvula en la bombona de CO2 recargable. Conectar el manorreductor con un tubo al difusor del acuario. Ajustar el número de burbujas de CO2 en las dos válvulas de aguja fina. Los dos manómetros muestran la presión de la bombona y la presión de trabajo. Uso seguro El manorreductor dispone de una válvula de seguridad que permite reducir la presión de trabajo que se haya ajustado demasiado alta de forma segura y sin dañar la válvula. La distribución de membrana del manorreductor garantiza una fiabilidad absoluta.
Consejo: desenroscando la tuerca de racor moleteada con una llave Allen se puede cambiar fácilmente al sistema de bombonas desechables.
Función del manorreductor:
Ahí se enrosca un manorreductor (JBL PROFLORA u001 o m001) para reducir la presión de la bombona de gas a presión. Este reduce la presión de la bombona de 50-60 bares a una presión de trabajo de aprox. 1,5 bares. Estos 1,5 bares se dosifican con una pequeña ruedecilla (válvula de aguja fina) de forma tan precisa que pueden verse y contarse las burbujas de CO2 del contador de burbujas conectado. La presión de la bombona y la presión de trabajo se indican mediante manómetros en algunos manorreductores. Aunque en realidad no es imprescindible mostrar dichas presiones ya que la presión de la bombona no disminuye lentamente como en el caso de las botellas de aire comprimido de los submarinistas, que así avisan si la botella se está agotando. En cambio, la presión de estas bombonas se mantiene al máximo para caer a cero en un instante. Por tanto, en este caso no se produce una disminución lenta de la presión de la bombona. La presión de trabajo solo sería importante si hubiera que ajustarla. Pero, normalmente, esto no es necesario. Aun así, todos se sienten mejor si los dos manómetros muestran las presiones correspondientes.